domingo, 19 de junio de 2016

De la historia de las banderas de España

La bandera de España no siempre ha sido la misma que actualmente. Por ello, hoy os traigo las diferentes enseñas que han representado a España a lo largo de la Historia.

Antes de comenzar con el tema, me gustaría aclarar que en esta entrada no entraré a dar mi opinión personal sobre cuál debería ser la bandera de España. El único interés que persigue este artículo es hacer un recorrido por las diversas banderas que ha tenido nuestro país.

Entrando ya en la materia que nos ocupa, hay que decir que el inicio de lo que hoy conocemos como España es un poco difuso, al no provenir ni de haberse independizado de otro Estado anterior. Es por esto que tomaré como fecha de inicio el año 1492, considerado por numerosos autores la fecha en la que podemos hablar de España como tal, a raíz de la toma de Granada y fin de la Reconquista por parte de los ejércitos de los Reyes Católicos.

En aquella época, el pendón Reyes Católicos era uno rojo con una banda de oro rematada por cabezas de serpientes, mientras que el ejército usó una bandera carmesí cuartelada con los blasones de los reinos pertenecientes a España.


Tras el matrimonio de Doña Juana, hija de los Reyes Católicos, con el Archiduque de Austria, Don Felipe el Hermoso, se introdujo en las banderas españolas uno de los mayores símbolos de la España de los Austrias: el Aspa de Borgoña o Cruz de San Andrés. El paño o tela sobre la que se bordara era secundario, pero generalmente se hacía sobre un fondo blanco.



Como dato complementario, podemos decir que el Aspa de Borgoña se encuentra, entre otros, en los pendones o banderas que portaban los Tercios Españoles, unidades militares de élite durante la etapa dorada del Imperio español. En las imágenes inferiores apreciamos, por orden, las banderas de los siguientes tercios: de Spínola, Morados Viejos y Amarillos Viejos.




Con la llegada de los Borbones a España, se empezó a usar el emblema de la casa de Borbón. Este consistía en el escudo de la casa sobre fondo blanco. Sin embargo, en aquella época la mayor parte de las banderas de los países europeos (España, Francia, Sicilia, Toscana…) eran blancas con un escudo encima. 


Dado que estaban frecuentemente en guerra entre sí, se producían confusiones en la mar, al no poder distinguirse si el buque avistado era propio o enemigo hasta no tenerlo prácticamente encima. Así las cosas, Carlos III encargó a su Ministro de Marina que le presentase varios modelos de banderas, con la única condición de ser visibles a grandes distancias. El Ministro convocó un concurso seleccionando doce bocetos de los presentados, los cuales mostró al rey. Carlos III eligió dos de ellos, a los que varió las dimensiones de las franjas, declarándolos reglamentarios el primero para la Marina de Guerra y el segundo para la Mercante.


El pabellón de la Marina de Guerra fue empleado como pabellón nacional en dos etapas, la primera entre 1843 y 1873, y la segunda entre 1874 y 1931. Estos dos períodos están separados por la Primera República, pues se suprimió los símbolos monárquicos del escudo. Aquí hay que decir que, si bien al final no se llevó a cabo, durante la Primera República se llevaron a cabo proyectos para sustituir la bandera rojigualda. Los proyectos eran una bandera semejante a la francesa (azul, blanco, rojo) y una bandera federalista (roja, blanca y morado).






Con la proclamación de la Segunda República el 14 de abril de 1931, llegó una nueva bandera: la bandera tricolor. El 27 de abril de ese año, el Gobierno Provisional promulgaba un decreto que determinaba en su artículo primero la adopción como bandera nacional de una formada por tres bandas horizontales de igual ancho, siendo la roja la superior, amarilla la central y morada oscura la inferior. Presentaba un escudo cuartelado de Castilla, León, Aragón y Navarra, con la Granada en punta, timbrado por corona mural y entre las dos columnas de Hércules. Esta bandera fue ratificada por la Constitución del 9 de diciembre de aquel mismo año. La disposición en tres franjas de distintos colores e igual anchura pudo verse influenciada por la tríada jacobina de "Libertad, Igualdad, Fraternidad". La franja morada se debía a que se creía que ese era el color del pendón que los comuneros enarbolaron contra el emperador Carlos I. Sin embargo, el verdadero color de aquel pendón era el carmesí, un color cercano al rojo. Cabe mencionar que la bandera tricolor ya se usó en algunos ambientes republicanos y, sobre todo, federalistas.




Durante la Guerra Civil Española, el bando republicano siempre mantuvo la misma bandera, la tricolor, pero el bando sublevado empleó varias. Primero fue la tricolor republicana, después la rojigualda sin escudo. A esta le siguió la rojigualda con el escudo republicano y por último, la rojigualda con el águila de san Juan. A lo largo de la dictadura, se hicieron algunas variaciones al escudo, siempre manteniendo un águila.




Fue, ya una vez en la Transición, cuando se constituyó la actual bandera. En este momento, según la Constitución vigente desde 1978, la bandera de España está formada por tres franjas horizontales, roja, amarilla y roja, siendo la amarilla de doble anchura que cada una de las rojas. Tiene además, el escudo cuartelado de Castilla, León, Aragón y Navarra, con la Granada en punta y el escusón central de la casa de Borbón, timbrado por corona Real y con las columnas de Hércules a sus costados. El escudo no se encuentra especificado en la Constitución, sino que lo está en una ley posterior, de ahí que no se implantara hasta 1981, tres años después de aprobar la Constitución.




Hasta aquí la entrada de hoy. Ya sabéis que, como siempre, podéis dejar vuestra respetuosa opinión en los comentarios.